Publicado en Inmigración
Contacto para Medios:
- Louise Pocock, Abogado de Política de Inmigración, Appleseed Centro de Justicia Legal de Carolina del Sur, [email protected], 803-630-1375 (se habla español)
- Aylin Gomez, Organizadora Comunitaria para la Política de inmigracion en Appleseed de Carolina del Sur, y miembra de DACA United SC, [email protected], 864-375-8163
Carolina del Sur (18 de junio de 2020) – Esta semana Appleseed de Carolina del Sur y DACA United SC celebran el octavo aniversario del programa de Acción Diferida para la Llegada de la Infancia (DACA) y hacen un llamado al Congreso para que las protecciones que ofrece el programa sean permanentes.
DACA se creó originalmente a través de una orden ejecutiva en 2012 bajo la administración de Obama, luego de que el Congreso no aprobó la legislación para proteger a los que fueron traídos a este país sin documentación a una edad temprana, también conocidos como Dreamers/Soñadores. El programa DACA permite a los Soñadores que cumplen con ciertos requisitos de edad, educación, empleo, y antecedentes para solicitar autorización de trabajo y protección contra la deportación. También les brinda oportunidades que muchos otros estadounidenses dan por sentado, cómo obtener una licencia de conducir e ir a la universidad. Si bien los beneficiarios de DACA pueden inscribirse en universidades públicas en el estado, Carolina del Sur todavía no permite que los beneficiarios de DACA obtengan matrícula estatal, ayuda financiera, o licencia ocupacionales como en cosmetología o enseñanza. DACA United SC y Appleseed de Carolina del Sur están trabajando con los beneficiarios y aliados de DACA para cambiar estas leyes estatales injustas y dar igualdad de acceso a oportunidade educativas y profesionales para todos los residentes de Carolina del Sur legalmente presentes.
Aunque el programa DACA no es una solución completa porque no otorga ningún tipo de estatus migratorio permanente o camino a la ciudadanía, ha sido un gran éxito económico y social, permitiendo a miles de personas que crecieron en este país a realizar sus sueños dándoles la oportunidad de trabajar y cuidar a sus familias sin temor a la deportación. Esto incluye a los miles de beneficiarios de DACA que trabajan en trabajos esenciales y de alto riesgo durante la actual pandemia de COVID-19.
Conforme el Centro de Progreso Americano, 700,000 beneficiarios de DACA contribuyen económica y socialmente a sus comunidades en todo el país. Casi 1.5 millones de personas viven en hogares con un beneficiario de DACA, incluidos más de un cuarto de millón de niños nacidos en los Estados Unidos cuyos padres tienen DACA. Debido a que pueden trabajar, los beneficiarios de DACA pagan $613.8 millones en pagos hipotecas y $2.3 mi millones en pago de alquiler cada año. Anualmente, sus hogares pagan $5.7 mil millones en impuestos federales y $3.1 mil millones en impuestos estatales y locales. Los beneficiarios de DACA están haciendo una diferencia social y económica en cada estado.
Carolina del Sur se ve afectada de manera similar. Ana García, Organizadora Comunitaria para la Política de Inmigracion en Appleseed de Carolina del Sur, y miembra de DACA United SC, una red de receptores y aliados de DACA que proporciona recursos para los beneficiarios de DACA en Carolina del Sur, explica que, “en el estado de Palmetto, los beneficiarios de DACA tienen profundas raíces familiares y económicas.” La edad promedio de llegada de los beneficiarios de DACA es de seis años. Más de 13,000 residentes de Carolina del Sur viven con un miembro de la familia que es beneficiario de DACA, incluidos más de 2,000 niños cuyos padres depended de su estado de DACA para mantener a sus familiar. Anualmente, estos beneficiarios de DACA pagan $21.5 million en impuestos estatales y locales, $43 millones en impuestos federales y más de $200 millones en gastos locales a la economía de Carolina del Sur.
A pesar de estos numerosos éxitos, el estado del programa DACA ha sido incierto desde Septiembre del 2017, cuando la Administración Trump se movió para finalizar el programa. AUnque los tribunales han permitio que DACA continue desde entonces, muchos Dreamers/ Soñadores no han podido postularse al programa, dejando a muchos sin protección. Actualmente, el caso se encuentra ante la Corte Suprema de los Estados Unidos y se espera una decisión en cualquier momento.
Sin embargo, Louise Pocock, Abogada de Política de Inmigración de Appleseed de Carolina del Sur, explica que “el Congreso tiene el poder de regular la inmigracion y debe actuar ahora para aprobar legislación que haga permanentes las protecciones de DACA y proteja a todos los Dreamers/Soñadores.” La consecuencias de poner fin a DACA, al eliminar la capacidad de cientos de miles de personas de trabajar legalmente y poner a innumerables familias inmigrantes y de estatus mixto en riesgo de separación, serían catastróficas y no proporcionan ningún beneficio a nuestro estado o nuestro país.
Aylin Gomez, Organizadora Comunitaria para la Política de inmigracion en Appleseed de Carolina del Sur, y miembra de DACA United SC nos recuerda el costo humano si termina el programa. “Los beneficiarios de DACA son miembros de nuestra comunidad. Son nuestros familiares, amigos, vecinos, y compañeros de trabajo. Los beneficiarios de DACA, incluida yo misma, estamos viviendo nuestras vidas en limbo, ya que la decisión está en manos de la Corte Suprema. DACA ha permitido a muchas personas incluida yo, la oportunidad de trabajar, obtener una licencia de conducir, y obtener una educación superior. Vidas humanas reales serán afectadas negativamente si el programa termina.
Independientement de la decision del la Corte Suprema, ahora es el momento de que Congreso actúe. Debemos crear protecciones permanentes y una camino hacia la ciudadanía para los beneficiarios de DACA y todos los Dreamers/Soñadores. Si no lo hacemos, las consecuencias serían catastróficas para todos, no solo para las familias inmigrantes